miércoles, 27 de abril de 2016

¡¡NO HAY!!




 En los años 90, había un programa de comedia que se transmitía por TV, en el cual un comediante llamado Honorio Torrealba (el de la foto), hacía las veces de vendedor y a todo lo que alguien le preguntaba, siempre decía en un tono muy molesto "¡¡NO HAY!!" y luego agregaba algunas frases ininteligibles, siendo la palabra "MAMANDO" una de las pocas que se entendía. Ese señor murió en el año 2010, pero me pregunto si en sus últimos años se daría cuenta de que su chiste de los 90 realmente se estaba haciendo realidad a partir del año 2005. A ver, les muestro algunas imágenes de como eran los supermercados acá en aquel entonces, donde este tipo hacía su famoso chiste. 




¿De donde Honorio Torrealba sacaba su famoso chiste de NO HAY? La verdad no lo se, pues así como los ven, eran los supermercados en los años 90: ¡Había de todo! Incluso podías elegir entre distintos tipos de marca de un producto. Leche en polvo Parmalat, La campiña (la que se muestra arriba de estas líneas) harina de maíz precocida (Juana, Harina PAN) y muchas cosas más (Malta caracas, regional, polar, etc, hoy ni eso). Y si se están preguntando si el poder adquisitivo era adecuado, les diré que, aunque les duela a los partidarios del gobierno, SI LO ERA. Yo fui estudiante universitario durante finales de los 90 y hasta el año 2008, viviendo en dos de las ciudades más caras del país, teniendo que pagar alquiler. ¡¡Y vivía con menos de la mitad del salario mínimo en aquel entonces!! Eso me alcanzaba para hacer mercado, lo cual hacía quincenal o mensual. Me quedaba dinero para pagar algunos cursos que podría hacer en la universidad y también para comer, ocasionalmente, en McDonnalds (asco) o Subway, KFC e incluso T.G.I. Friday's, que es uno de los restaurantes más caros que conozco. También me alcanzaba el dinero para tener algunos hobbies, entre ellos los juegos de ROL, de los cuales llegué a tener mis libros originales (y no eran nada económicos) y el juego de cartas Magic the Gathering, que, por sino lo saben, es considerado uno de los juegos de cartas más costosos que existen. ¿Por que menciono todo esto? Para que se den cuenta de que si existía poder adquisitivo, que una persona, con menos del salario mínimo, podía hacer algo y no simplemente "subsistir". La leche en polvo ha desaparecido, la mantequilla es un problema de conseguir, azucar, arroz, espaguettis, nada de eso se consigue en los anaqueles de un supermercado. La gente debe hacer colas en las afueras de un supermercado durante horas, a ver si llega una cava (un camión de transporte de alimentos) y eso sólo para ver si trae alguno de estos artículos. Jabones de baño, papel higiénico y toallas sanitarias femeninas, se han vuelto también artículos de lujo, los cuales es imposible encontrar. Y ni hablar del tema de las medicinas, donde hay que hacer un "tour" por todas las farmacias de la ciudad a ver si se encuentran.


Cola en un supermercado chino.
Seguramente llegó harina precocida o pasta, o quizás, cruzando los dedos, papel higénico



Por supuesto, todo esto ha venido agudizándose con los años, al punto en que estamos hoy. Devaluaciones, una enorme inflación (quizás la más alta del mundo) y unas políticas económicas que ni nuestros antepasados en las cavernas podrían haber implementado (pido perdón a nuestros ancestros prehistóricos por poner a estos gobernantes a su altura) han destruido por completo la economía de nuestro país. Y ahora, este año, con el fenómeno climático conocido como El Niño, estamos experimentando una sequía enorme, lo cual causa que el servicio de agua y de electricidad sea interrumpido constantemente. ¿Por qué? Pues porque acá el 80% de la electricidad se genera mediante centrales hidroeléctricas y a causa de la sequía, no se puede generar lo que requiere el país. Por supuesto, todos los días teníamos apagones de 2 horas en casi todas las ciudades (excepto en la intocable CAPITAL y zonas aledañas a ella), pues parece que para nuestros gobernantes CARACAS ES CARACAS Y LO DEMÁS ES MONTE Y CULEBRA (es decir, prescindible y descartable en todo sentido). Y comenzando esta misma semana, desde el lunes 25 de abril de 2016, los apagones se incrementaron a 4 horas de duración. ¿Qué tenemos ahora? ¡Esto en los supermercados!



Y esto en las calles: 



Para terminar este cuento, les comento lo siguiente: Hoy en día el poder adquisitivo es NULO. Yo gano el equivalente a 2.5 salarios mínimos (45.000 Bs. al mes) y eso no me alcanza sino apenas para comprar comida, cuando se consigue y pagar el alquiler. ¿Cenar o almorzar fuera? Ni pensarlo. ¿Comprar galletas o algún tipo de golosinas para tener en casa? ¡Ni hablar! Y ni pensar en hobbies o pasatiempos. Ahorita sólo tengo los vídeo juegos, los cuales bajo gratis, los libros, que también descargo gratuitamente o me lo regalan sus propios autores. Ahora gano mucho más que antes, cuando era estudiante, y el dinero simplemente se EVAPORA o quizás se transmuta en NADA de la noche a la mañana. Los únicos que han salido de la pobreza son los enchufados del gobierno y por eso no quieren que se activen los mecanismos constitucionales para poder sacarlos. Ah y esto es de hoy: La canasta básica es decir, los productos alimentarios y de higiene necesarios para que una familia pueda vivir bien (durante un mes), ahora tiene un costo de 141.877 Bs, es decir cerca de 4 veces lo que yo gano al mes. Y esta publicación es de un medio adepto al gobierno, lo que indica que puede ser mucho más, pues los medios que trabajan en pro de este gobierno manipulan todo para que no se note lo mal que están gobernando. Como dice una canción: "Así, así,  así es que se gobierna, dicen los Chavistas revolcándose en la mierda" 


Me disculpo con mis lectores habituales, pues este no es el tipo de texto que suelo tratar en mi blog. Aunque no sea especializado, siempre trato de evitar estas cosas, pero ya no es posible. A causa de muchos de estos problemas es que he estado alejado de la blogosfera (sumen también el pésimo servicio de Internet que nos proporciona CANTV, la cual, ADIVINARON, también pertenece al gobierno). 

Ahora si tiene validez ese malnacido chiste de NO HAY que tanto contaba Honorio Torrealba en los 90. Ahora si, no en aquel entonces. Ahora no hay dinero, no hay víveres, no hay leche, no hay cepillos de dientes, no hay detergente, no hay jabón, no hay papel higiénico, no hay toallas sanitarias, no hay pasta (espaguetti), no hay crema dental, no hay medicinas, no hay pañales, pero si HAY PATRIA, si hay BACHAQUEROS (seres (¿humanos?) que se dedican a comerciar con estos artículos de primera necesidad, vendiéndolos entre 10 y 20 veces su precio) y enchufados que quieren seguir robando. Pero todo tiene un límite, la medida más grande también se colma y acá la gente no va a acostumbrarse como ha pasado en otros países.